Los profesores del colegio al que iba la víctima trataron de despegarse de las declaraciones de otra maestra que había confirmado que el adolescente asesinado “siempre estaba solo”.
Los profesores del colegio al que iba Joaquín Sperani, el adolescente de 14 años presuntamente asesinado por su mejor amigo en Laboulaye, difundieron una carta en la que se refirieron a las versiones de que la víctima sufría bullying e intentaron despegarse de las declaraciones de otra docente.
“Queríamos resguardar la integridad de nuestros menores”, fue una de las frases más resonantes de la carta que escribieron los docentes del Instituto Provincial de Educación Media (IPEM) Nº 278 “Malvinas Argentinas” y que difundieron el viernes por la noche, a menos de una semana de haber encontrado el cuerpo del menor en una casa abandonada ubicada a la vuelta de la institución.
El texto puede leerse como una respuesta a las declaraciones que realizó una docente del mismo colegio, quien describió a Joaquín como “un chico muy tímido”, confirmó que “siempre estaba solo” en los recreos y detalló que no le encontró “ningún grupo de amigos”. “Esa característica marcaba la diferencia con el resto”, declaró.
A las pocas horas de la entrevista que dio la mujer, quien también relativizó la relación de mejores amigos entre la víctima y el alumno detenido, el resto de los docentes enviaron una carta al diario La Voz de Córdoba para “dejar constancia del apoyo a la familia de Joaquín Sperani”.
“Nos solidarizamos y acompañamos a su familia desde el primer momento, desde su búsqueda, y que a pesar del profundo dolor que sentimos debemos seguir trabajando por y con nuestros estudiantes en pos de resguardar a los mismos”, señalan.
En otro pasaje del texto publicado el viernes a última hora, los docentes responden a las versiones sobre que el adolescente de 14 años sufría bullying en el colegio. “No somos partícipes de los comentarios ni de las opiniones vertidas en la prensa. El motivo de no realizar declaraciones públicas es para resguardar la integridad de nuestros menores y no entorpecer la investigación”.
La maestra que había declarado algunas horas antes, había planteado: “La situación de bullying se manifiesta no siempre de forma violenta, sino a través de la exclusión en el aula. Por ahí el bullying está muy relacionado con el síndrome de Estocolmo, por el que se terminan haciendo amigos de sus propios victimarios”.
La carta, firmada por una gran cantidad de docentes, también respondió a esas declaraciones que dio la profesora. Allí, los firmantes explicaron cómo trabajan las situaciones de acoso escolar y de qué manera se actúa cuando un alumno es aislado por el resto del grupo.
“En nuestra escuela, ante situaciones problemáticas que se dan en las aulas con nuestros estudiantes se trabaja de forma permanente y en jornadas especiales, tales como las Jornadas Interdisciplinarias de Integración de Saberes (JIIS) que son de público conocimiento en la comunidad educativa”, describieron.
Por otra parte, señalaron: “Queremos llevar tranquilidad a nuestros estudiantes y a sus familias, haciéndoles saber que siempre los hemos acompañado en sus trayectorias y estamos comprometidos en escucharlos y contenerlos en esta difícil situación. Con profundo respeto abrazamos a la familia de Joaquín y rogamos para que se haga justicia”.
“Como personal docente estamos a disposición de la Justicia y el Juzgado que está a cargo de la investigación para todo lo que se requiera, que se prestó colaboración y se seguirá haciendo”, aseguraron en el final de la carta, firmada por el “Equipo docente del Ipem Malvinas Argentinas.
El Ministerio de Educación provincial abrió una investigación interna e intervino con equipos interdisciplinarios en el colegio apenas conocido el crimen de Joaquín. Las actividades escolares, señaló La Voz, se retomaron el jueves pasado con jornada reducida.
FUENTE: TN