Hay de 1.000 focos activos, unos 370 de ellos en Columbia Británica y más de 230 en el estado de Territorios del Noroeste. Unos 20.000 habitantes de Yellowknife tuvieron que abandonar la localidad.
Los gigantescos incendios en Canadá obligaron a evacuar a los habitantes de una ciudad del norte del país y a declarar el estado de emergencia en la región de Columbia Británica, la más afectada con más de 370 fuegos.
“La situación es imprevisible en estos momentos y nos esperan días difíciles”, dijo el viernes por la noche David Eby, el primer ministro del estado de Columbia Británica, que declaró el estado de emergencia en su región.
Según la agencia de noticias AFP, los 20.000 habitantes de Yellowknife, una de las principales ciudades del extremo norte de Canadá, tuvieron hasta la noche del viernes para abandonar esa localidad, que está muy aislada.
“Me siento perdido, no tengo ni idea de lo que sucederá a partir de ahora”, declaró a la AFP Byron Garrison, de 27 años, un trabajador en el sector de la construcción que llegó al aeropuerto de Calgary desde Yellowknife acompañado por su novia y un amigo.
Los habitantes evacuados de los territorios septentrionales se registran en una sala del aeropuerto y luego los realojan en hoteles
Los habitantes evacuados de los territorios septentrionales se registran en una sala del aeropuerto y luego los realojan en hoteles.
“El gobierno nos dijo que tenemos que irnos. Entonces, con mi mujer tomamos algo de ropa y a Rosy (su perro)”, explicó Richard Manubag, 53 años, empleado en un café de Yellowknife, quien confiaba en pasar solo “tres o cuatro días” en Calgary, situada a 1.700 kilómetros al sur de su localidad. “Estoy triste. (…) Pienso en todo lo que tengo en mi casa, no sé qué sucederá”, añadió.
Yellowknife ha quedado prácticamente vacía y en sus calles solo quedan soldados movilizados ante los incendios, explicó a la cadena de televisión CBC Chad Blewett, un piloto de avión que participó en las evacuaciones.
La mayoría de las personas de la ciudad afectada se fueron por carretera, según las autoridades. “Vamos a salir todos juntos de este verano increíblemente difícil”, aseguró el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, quien estuvo el viernes por la noche con varios evacuados en un centro de acogida en Edmonton, a unos 1.000 kilómetros de Yellowknife.
Actualmente, más de 1.000 incendios arden en Canadá, más de 370 de ellos en Columbia Británica y más de 230, en el estado de Territorios del Noroeste.
En pleno verano boreal, el país se está viendo asolado por una impresionante oleada de incendios, que provocó la evacuación de 168.000 ciudadanos y quemó hasta 14 millones de hectáreas, el equivalente de la superficie de Grecia. Unos 15.000 habitantes de Territorios del Noroeste tuvieron que ser evacuados.
En pleno verano boreal, el país se está viendo asolado por una impresionante oleada de incendios, que provocó la evacuación de 168.000 ciudadanos y quemó hasta 14 millones de hectáreas
La situación resulta crítica en localidades como Kelowna, con 150.000 habitantes, o West Kelowna, con 30.000, situadas en la zona del lago Okanagan.
El jefe de los bomberos de West Kelowna reconoció el viernes que la noche anterior había sido “probablemente una de las más duras de su carrera”.
“Afrontamos el equivalente de 100 años de incendios, todos ellos concentrados en una sola noche”, declaró a los medios Jason Brolund.
“Desplegamos todos nuestros esfuerzos para reducir el impacto de las llamas. Pero al final, la madre naturaleza fue demasiado fuerte”, reconoció Loyal Wooldridge, un dirigente local de Kelowna.
Canadá sufrió en los últimos años una sucesión de fenómenos meteorológicos extremos, cuya intensidad y frecuencia se ve acentuada por el cambio climático.
FUENTE: Télam