Una institución parroquial acusó a las estudiantes por “exhibiciones indeseables” por no acatar las normas sobre el largo de la falda del uniforme. La reacción de los padres de las estudiantes.
Las autoridades del Instituto Parroquial Bernardo D’Elia detallaron en un comunicado firmado por el Equipo Directivo de Nivel Medio. Aseguraron que por “sucesivas situaciones de no cumplimento (del uso del uniforme) que superaron ampliamente alguna travesura esporádica y que denotan la necesidad de concentrar nuestra tarea cotidiana en controlar más que educar”.
Las familias recibieron la nota donde detallaron que “se observó la persistencia en el uso de una pollera sin el largo establecido en el AEC, con muslos a la vista o con dobleces en la cintura que llevaban a que las mochilas se engancharan en la espalda hasta subir las faldas hasta exhibiciones indeseables, entre muchas otras cuestiones”.
Los directivos apuntaron a las veces que tuvieron que llamar la atención a las mujeres: “La reiteración de estas situaciones, aún con los llamados de atención y las sanciones correspondientes, no mostraron una decisión concreta de las estudiantes de cumplir con la norma”.
Como parte de la solución autorizaron otra prenda para las alumnas: “Es por estas razones que la institución, en una medida extrema basada en la necesidad de mostrar la necesidad de sostener una normativa, en lugar de medir polleras cada día, que evidente e insistentemente no cumplen con lo pautado, ha decidido restringir el uso de polleras desde el mes de abril próximo pasado, planteando esta decisión a cada curso por separado. La medida fue y es definitiva y, por tal razón, en el diálogo con los estudiantes, es que se suma la bermuda de igual material que el pantalón largo y que además se utiliza en educación física, para todos los estudiantes. Sumada también, a la bermuda de gabardina ya pautada que sabemos que tiene un costo aún mayor”, concluyeron.
El rechazo de las alumnas acusadas de “exhibicionismo”
Una mamá de las alumnas acusadas de exhibicionismo aseguró a medio Perfil Córdoba que “más allá de polleras o polleras no, lo que hace ruido en esta época es que sigan poniendo hincapié en que exhiben los muslos, que las mochilas le hacen saltar las polleras y hacen exhibicionismo. Deberían poner el uniforme es tal y listo, sin estos fundamentos ridículos”, planteó.
La medida no es novedosa sino que rige desde marzo de este año. Según las voceras de la institución que“el uniforme es muy claro con el largo de la pollera, que es cuatro dedos por arriba de la rodilla. Las chicas insistían en usar una falda que no era la del uniforme mucho más arriba de las indicciones”.