El plus se mantiene en el mismo valor desde marzo pasado. El próximo mes ningún jubilado o pensionado recibirá menos de $ 322.798,48.
En noviembre, los jubilados y pensionados de haberes mínimos cobrarán el bono de hasta $ 70.000 que fue oficializado a través Decreto 965/2024 (Bono Extraordinario Previsional) publicado este jueves en el Boletín Oficial.
El bono se viene pagando desde marzo de este año, sin ningún ajuste por inflación o movilidad. Y hace 2 semanas, el director ejecutivo de la Anses, Mariano de los Heros, anticipó que el Presupuesto 2025 contempla la continuidad del pago del bono de hasta $ 70.000 y sin ajuste. También afirmó que la intención del Gobierno es no prorrogar la moratoria previsional que vence en marzo de 2025.
En consecuencia, en noviembre las jubilaciones, pensiones y asignaciones tendrán un incremento del 3,47% que corresponde a la fórmula de movilidad que toma como referencia el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de septiembre publicado por el INDEC. Pero al mantenerse sin cambio el bono de hasta $ 70.000, el aumento efectivo final para los haberes mínimos y submínimos será más bajo; entre el 2,5% y el 2,7%.
Según ANSeS en noviembre el haber mínimo será de $ 252.798,48 más el bono de $70.000 “por lo que ningún jubilado o pensionado recibirá menos de $ 322.798,48″. En octubre, el ingreso mínimo con el bono era de $ 314.321. En tanto, “quienes tengan haberes inferiores a esa cifra tendrán un bono proporcional hasta alcanzarla”.
Por su parte, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) será de $ 272.238,78 ($ 202.238,78 de haber con aumento, más $ 70.000 de bono). En octubre era de $ 265.456. Y las Pensiones No Contributivas (PNC) por Invalidez y Vejez, de $ 246.958,94 ($ 176.958,94 de haber con aumento, más $ 70.000 de bono). En octubre era de $ 241.024.
En tanto, la Asignación Universal por Hijo (AUH) ascenderá a $ 90.837 y la Asignación Familiar por Hijo a $ 45.420 para el primer rango de ingresos.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) este año hasta septiembre, “los haberes mínimos (con bonos) cayeron 6% real, por la incidencia de los bonos, que se mantienen sin aumentos desde marzo”, mientras “los haberes jubilatorios superiores a la mínima mostraron una recuperación de 10% en términos reales respecto a diciembre 2023”.
Por el alcance del bono –más 5 millones de jubilados y pensionados- y la magnitud del congelamiento, la licuación de los pagos previsionales son los que mayor incidencia tienen en la reducción del gasto presupuestario.
Además, desde el arranque de 2024 los haberes mínimos perdieron el reintegro del IVA por las compras con la tarjeta de débito sobre la cuenta bancaria donde cobran sus haberes. Y se redujeron los descuentos sobre los medicamentos del PAMI.
SN