El papa Francisco está siendo tratado con oxígeno suplementario para ayudarlo a respirar, dijo el Vaticano este martes, un día después de que sufriera dos episodios de insuficiencia respiratoria aguda.
Francisco está recibiendo oxígeno nuevamente a través de un tubo nasal, dijo el Vaticano. El lunes, el Papa recibió una máscara de oxígeno para ayudarlo con su respiración después de someterse a dos broncoscopias.
El pontífice de 88 años “no está fuera de peligro”, dijo el Vaticano, y agregó que su condición sigue siendo “compleja”.
Francisco está despierto y descansando y no tiene visitas planificadas, dijo una fuente del Vaticano a CNN.
Las dificultades respiratorias del lunes fueron causadas por una “acumulación significativa de moco endobronquial” y un consecuente estrechamiento de las vías respiratorias, dijo el Vaticano el lunes.
Varios expertos médicos con los que habló CNN explicaron que si un paciente no responde bien a la ventilación no invasiva, como la de una máscara de oxígeno, el siguiente paso sería colocarlo en un respirador mecánico con un tubo de respiración.
El Papa ha estado hospitalizado en el Hospital Gemelli de Roma desde mediados de febrero, donde ha estado luchando contra una neumonía doble.
El viernes, tuvo un episodio respiratorio repentino, por lo que le obligó a recibir una máscara de oxígeno. Su hospitalización actual es su cuarta, y ahora la más larga, estadía desde que se convirtió en pontífice en 2013.
