Miguel Ángel Russo tomó una decisión clave para el futuro de Boca: le bajó el pulgar a un referente y ya tendría a su reemplazo.

La eliminación del Mundial de Clubes y el empate frente al Auckland City marcaron un antes y un después en el ciclo de Miguel Ángel Russo al frente de Boca. Con el plantel ya de regreso en la Argentina, el entrenador y el Consejo de Fútbol que lidera Juan Román Riquelme comenzarán una etapa de reestructuración de cara al segundo semestre de 2025. Y dentro de las primeras decisiones fuertes, todo indica que Agustín Marchesín dejaría de ser tenido en cuenta.

El arquero, que llegó al club a fines de enero tras un acuerdo entre Boca y Gremio, cumplió el sueño de defender los colores del equipo del cual es hincha. Sin embargo, su paso por el Xeneize parece estar cerca de llegar a su fin. Marchesín fue titular en los tres partidos que Boca disputó en Estados Unidos durante el Mundial de Clubes, pero su flojo rendimiento ante Auckland City habría sido determinante para que Russo le bajara el pulgar.
La actuación del arquero no terminó de convencer al cuerpo técnico. El empate 1-1 contra el equipo neozelandés dejó a Boca fuera de los cuartos de final y fue uno de los golpes más duros en el ciclo reciente. Este resultado se sumó a un antecedente que sigue resonando en la memoria del hincha: aquella noche contra Alianza Lima en la Copa Libertadores, cuando Marchesín pidió el cambio a segundos del final, dejando al equipo sin su arquero en la definición por penales.
En este contexto, Russo ya comenzó a definir los movimientos del mercado. Además de Marchesín, otros nombres de peso como FrankFabra, Marcos Rojo, Marcelo Saracchi y Sergio Romero estarían transitando sus últimos días en el club. La renovación apunta a bajar la edad promedio del plantel y darle espacio a futbolistas con proyección.
Russo ya tiene en la mira a su arquero ideal
Con la salida de los dos arqueros más experimentados casi definida, Miguel Ángel Russo ya habría señalado al guardameta que pretende sumar para el próximo semestre. El apuntado es Orlando Gill, actual arquero de San Lorenzo, quien con apenas 25 años se consolidó como una de las grandes figuras del Ciclón en la temporada.

Gill, de nacionalidad paraguaya, tuvo actuaciones destacadas en el torneo Apertura de la Liga Profesional, donde su equipo llegó hasta las semifinales. Su rendimiento bajo los tres palos y su perfil joven lo convirtieron en una opción atractiva para Boca, que busca reforzar un puesto que quedó bajo la lupa tras la floja performance internacional.
Si bien todavía no hay negociaciones formales entre los clubes, Gill aparece como el objetivo principal para defender el arco xeneize en la segunda parte del año. Su llegada podría abrir una nueva etapa en la reconstrucción del equipo de Russo, que ya piensa en el 2026 con un plantel renovado, competitivo y con mayores exigencias.
Mientras tanto, Boca retomará los entrenamientos el próximo martes en Buenos Aires y se espera que en los próximos días comiencen a definirse las primeras bajas y los posibles refuerzos que llegarán para afrontar el nuevo semestre.
Fuente: Noticias Argentinas