En el marco de la semana de la Lucha contra la Muerte Súbita, la médica cardióloga y directora de Enfermedades Crónicas No Transmisibles del Ministerio de Salud, Marcela Tripolone, mantuvo comunicación con el equipo de Medios Provincia donde habló al respecto. Mirá la nota.
Entre el 21 y el 27 de agosto se conmemora la Semana de la Lucha contra la Muerte Súbita por iniciativa de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y la Fundación Argentina de Cardiología (FAC). El objetivo de esta fecha es concientizar a la población sobre la importancia de conocer las maniobras iniciales adecuadas para tratarla y tomar cursos de reanimación cardiopulmonar (RCP).
“Tiene dos causas, dependiendo de las edades en su mayor frecuencia. Pacientes menores de 35 años, habitualmente son por arritmias o cardiopatías congénitas. En los pacientes mayores de 35 años, habitualmente es por cardiopatía isquémica que se puede prevenir con cuidados como lo son: evitar el tabaquismo; el sedentarismo; el sobrepeso; tener controlada la hipertensión que es una de las causas frecuentes de daño vascular que posteriormente se tapan las arterias; mantener el colesterol normal”, explicó la doctora Marcela Tripolone.
“Es evitable. Hay prevenciones, evitando todos los factores de riesgo que nos llevan a estos episodios de muerte súbita “
Dado que el 70% de los casos de muerte súbita se dan por fuera del ámbito hospitalario, es fundamental tener conocimiento sobre cómo manejar situaciones de este tipo, teniendo en cuenta la escasa ventana temporal que se dispone para aplicar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) que puedan revertir el cuadro.
Los estudios reportan una incidencia variable de este tipo de episodios que oscilan entre 20 y 140 casos por 100.000 habitantes. Si bien las estadísticas vitales de la Argentina no reportan como causa de defunción a la muerte súbita, en base a la información internacional y según reportes nacionales, se puede estimar que localmente hay alrededor de 40.000 casos anuales.
De esta manera, se puede esperar aproximadamente 1 caso de muerte súbita cada 1000 habitantes. Es por esto que remarcan la importancia de establecer la obligatoriedad de un cardiodesfibrilador automático externo (DEA) en lugares públicos y privados de acceso público con presencia de 1.000 personas al día.